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RETO II:  RELATO RELACIONADO CON TU SIGNO ZODIACAL.                                                                          ACTO I La huida del cisne. Tan pronto cerré la puerta de la habitación, Chaikovski no fue más que un ruido grave, amortiguado. —Anna, ¿estás ahí dentro? — empujé la puerta metálica del pequeño cubículo. No había nadie. — ¿Anna? Suspiré cuando escuché la risita en el cubículo del fondo, arrastré los pies y me arrodillé sobre las baldosas blancas. Bajo el fino, casi inexistente nilón negro, se me helaron las rodillas. En el espacio que existía entre la puerta y el piso, mis ojos se entrecerraron al distinguir las piernas dobladas y las puntas de satín negro de las zapatillas. El pálido rostro cincelado apareció repentinamente en el pequeño espacio, el largo cabello negro y liso me recordó a las cortinas del teatro. —¡Bu! — sus ojos lucían enormes en medio de la mueca burlona. Bufé hastiada, siempre estaban enviándome a buscarla. —Anda ya. —¿Te manda Ele

RETO 1: RELATO LIBRE.

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    Mari   —¡Hola!... ¡hola! — entrecierra los ojos, intentando ajustar la mirada tras la opacidad del plástico del visor en el que se condensan los restos de la respiración que logran escapar de la mascarilla pegada al tabique de su nariz. Sus manos tiemblan ligeramente, los medicamentos en la bandeja ruedan sobre la superficie metálica, así que reafirma el agarre contra su pecho. Comenzaba a sentir los suaves pinchazos al final de las extremidades, en la base de los pies, en las palmas de las manos.  Deshidratación . Siete horas sin beber líquido porque quitarse el traje plástico de protección del cuerpo dentro de un hospital, uno de los lugares con la carga viral más alta de infección, aun parecía una maldita locura.  Soy demasiado vieja para esto.  Su pecho se contrae en un suspiro suave, esperando ser vista  —  ¡Hola! La persona a unos metros se detiene. Pocas son las bombillas que con tenue luminiscencia ámbar alumbran el largo pasillo desierto y bajo la aterradora espo

So... iba a subir esto a AO3 but no escribiré fanfics, so...

  Ok, ok, ok, ok.  Sé que no tengo un blog. Creo que lo intenté un par de veces pero mi vida es – aun lo es – una serie de acontecimientos en constante cambio bajo la influencia del cosmos del universo  – y una pandemia que aparentemente nadie esperaba – así que no tenía idea sobre qué escribir. Lo pensé demasiadas veces. La mayoría de tutoriales en Youtube, solían decirme que la mejor idea para un blog era escoger un tema y partir de ahí. Mi problema sin embargo, fue que jamás pude escoger un solo tema. Verán, y como explicaré líneas más abajo. Amo el té, los gatos, el maquillaje, la cocina, la lectura, escribir, el deporte, repostería, ilustración, pintura, acuarela, música y los idiomas y aunque con el pasar del tiempo esta lista debería haberse detenido, eso no ha pasao. No. De hecho, lo más probable es que la lista siga creciendo y sea interminable cuando llegue a los cuarenta – tengo 24 – pero lo cierto es, que me apasiona aprender cosas nuevas. Más que conocer